Sheena, Queen of the Jungle (1984)

La semana pasada se editó en Estados Unidos un interesante libro de cómics, Jungle Girls, que analiza en detalle a los clones femeninos de Tarzán que tuvieron una enorme popularidad entre 1938 y fines de la década de 1957.

Después de las propuestas de superhéroes fue el género más vendido de la historieta en aquellos años.

Hubo numerosos personajes como Tigra, Rima, Cave Girl, Judy de la jungla, Vooda y Rula, pero ninguna de esas heroínas llegó a conseguir la popularidad masiva de Sheena.

Un caso muy curioso porque esta creación de Will Eisner (The Spirit) y Jerry Iger, que apareció en 1937, en realidad no tenía ninguna característica especial que no se pudiera encontrar en el resto de las historietas mencionadas.

Sin embargo, por alguna razón, los lectores la eligieron como la favorita del género y hasta la fecha el cómic sigue vigente con guiones más elaborados.

Sheena tuvo un serial en 1955 y una serie para televisión en el 2000 protagonizada por Gena Lee Nolin (Baywatch).

En 1984 fue encarnada por la chica Bond, Tanya Roberts, en una película que fue aniquilada por la prensa y hoy es recordada por el público con más cariño.

Hace poco volví a verla después de muchos años y la verdad que no me pareció en absoluto la producción horrible que liquidaron los críticos en su momento.

De entrada es una adaptación bastante fiel del cómic y Tanya está bárbara en el rol principal.

De hecho, su interpretación es completamente superior a lo que hizo en View to Kill, donde encarnó una chica Bond intrascendente que parecía la nieta de Roger Moore.

Al rol de Sheena le puso bastante entusiasmo y obviamente su atractivo físico era uno de los ganchos de esta producción.

La película fue dirigida por John Guillermin, responsable de la remake de King Kong de 1976 y presentaba algunos elementos que hoy ofendería a los amigos de la corrección política.

Hay un par de escenas que serían imposibles de concebir en la actualidad.

Por ejemplo, al comienzo del film la versión adolescente de Sheena aparece corriendo por la selva con el pecho descubierto.

Algo que tiene sentido desde lo argumental, porque se crió en una tribu de mujeres africanas que no usaban corpiño, pero en el 2019 eso sería un escándalo.

Tanya Roberts también aparecía completamente desnuda en un par de escenas y aunque esos momentos estaban justificados y no era las típicas escenas de explotación estilo Martes 13, los moralistas de 1984 quedaron indignados con esos fragmentos del film.

Hoy probablemente ocurriría lo mismo.

Lo cierto es que en años posteriores se hicieron películas mucho más terribles basadas en cómics. Podemos citar los casos de Gatúbela, Elektra, The Spirit, Batman y Robin y la última versión de los Cuatro Fantásticos.

Sheena no era tan terrible y tenía algunas virtudes que se pasaron por alto cuando se estrenó en los cines.

En lo referido a los aspectos visuales el trabajo de Guillermin es impecable.

La historia se filmó en locaciones reales de África y el director le sacó provecho a la belleza de los paisajes que eran espectaculares.

Un aspecto de la película donde jugó un papel clave la fotografía del director italiano Pasqualino De Santis, ganador del Oscar por Romeo y Julieta, de Franco Zeffirelli.

La edición corrió por cuenta de Ray Lovejoy, colaborador de Stanley Kubrick y James Cameron, y la música de Richard Hartley (The Rocky Horror Show) le otorgaba un clima muy emocional a las apariciones de Sheena.

Todo el trabajo con los animales, que no eran CGI, también era excelente.

Sobresalen especialmente la escena en que la heroína rescata a su madre adoptiva de una prisión con unos elefantes y la batalla final en la selva donde es asistida por el resto de los animales.

Tanya Roberts, quien fue tratada por los críticos como la peor actriz de la historia, era completamente convincente en la situaciones dramáticas y no tuvo reparos de participar en las secuencias de acción.

Otra exageración que se puede refutar con facilidad.

Por supuesto el guión no era una obra de Hemingway, pero capturaba muy bien el espíritu del cómic original.

Con todas sus imperfecciones, en materia de aventuras Sheena fue superior a Greystoke ( Christopher Lambert) que decaía por completo en su segunda mitad para convertirse en un drama depresivo y la versión del hombre mono con Bo Derek, de 1981, que era mucho más ridícula.

Dentro del reparto otras figuras conocidas fueron Ted Wass, quien luego aparecería en la serie Blossom de Mayin Bialik y Donovan Scott, el recordado cadete Leslie Barbara de Locademia de Policía.

A quienes nunca la vieron, por el motivo que fuera, recomiendo darle una oportunidad.

El año pasado la productora Millenium, que es la Cannon Films, de la actualidad anunció una nueva película que se encuentra en producción.

Este es un breve avance de la versión de 1984.