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Reseña de Snoopy in Space

Calificación: A

En estos tiempos donde los clásicos de la animación a menudo son masacrados en remakes deplorables es un alivio saber que algunas producciones tienen otro destino.

Sobre todo cuando en la actualidad te podés encontrar con mamarrachos de este tipo.

Afortunadamente Peanuts siempre contó con una especie de angel guardían que protegió a estos personajes de terminar en producciones mediocres.

El estilo de entretenimiento idiota que prima actualmente en muchos dibujos animados resulta incompatible no sólo con los cómics de Schulz sino con las obras del realizador Bill Meléndez que convirtieron a Charlie Brown y sus amigos en íconos relevantes de este género.

En el 2015 tuvimos en el cine la excelente película de la productora Blue Sky (lejos lo mejor que hizo esa compañía) que representó el regreso a la pantalla grandes de esta franquicia después de 25 años.

También pudimos disfrutar la serie de iTunes, Peanuts Motion Comic (2008) y la producción fancesa Peanuts by Schulz (2011).

Todas estas porpuestas tuvieron un punto en común.

En cada caso había un respeto absoluto por el creador de los cómics y el director que los adaptó en la animación.

Una cuestión que se relaciona con el hecho que la familia Schulz nunca se vendió por un cheque y los descendientes del artista se involucran personalmente en todos los nuevos proyectos para evitar que los personajes se arruinen con las actuales fórmulas marketineras.

Snoopy in Space es una miniserie de 12 episodios que se estrenó el pasado mes de noviembre en la plataforma de streaming Apple TV+ y tuvo el objetivo de conmemorar el 50 aniversario de la misión del Apolo 11, desarrollada por la NASA en julio de 1969.

La relación del perro con la NASA es muy estrecha al punto que el personaje se convirtió en la mascota de la era del programa Apolo y cuenta con una estatua en el Centro del espacio Kennedy.

La agencia aeronática también se involucró en el contenido de los argumentos y el resultado final derivo en una miniserie que evoca con mucho cariño los mejores trabajos de Meléndez.

La realización corrió por cuenta de la productora canadiense DMX Media, que actualmente es dueña de todo el catalógo de estudios clásicos como Cookie Jar, y DIC, más la franquicia Frutillitas y las obras de animación de Peanuts.

En el último tiempo se destacaron con producciones propias como la remake de Rocky and Bullwinkle y la nueva serie de Carmen Sandiego, estrenada en Netflix.

Snoopy in Space presenta una comedia de enredos donde el perro se empecine en cumplir su sueño de ser astronauta y viajar a Marte pese a ser rechazado inicialmente por la NASA.

A través de 12 capítulos, que tienen ocho minutos de duración, se trabaja muy bien el estilo de humor de Schulz con la particularidad que en este caso también hay un importante contenido educativo.

Más allá del entretenimiento también se trabajan cuestiones científicas relacionadas con la labor de la agencia espacial.

Lo genial de la miniserie es que está escrita de una manera que puede ser disfrutada tanto por chicos pequeños como adultos.

En lo referido a los campos más técnicos nos encontramos con una obra que está en perfecta sintonía con la identidad visual que tuvo tradicionalmente la obra de Bill Meléndez, donde la musicalización se trabajó integramente con melodía de jazz.

Si sos fan de Snoopy no hay modo que nos disfrutes con esta historia que mantiene el nivel de calidad al que esta franquicia nos tiene acostumbrados.

En lo personal me encantó y la recomiendo.

 

2 comentarios en «Reseña de Snoopy in Space»

  • Snif….adoro a este perrito
    ¿Tanto trabajo era no masacrar a She-ra y a los Thundercats y crear una obra como esta?

  • es triste ver como la industria masacra grandes clasicos, quitandole su identidad solo para seguir modas y tendencias de la epoca en ves de mostrar a las nuevas generaciones que los hiso grandes y unicos

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