Paradox: La película hippy de Daryl Hannah

Al terminar de ver esta película, si tenés la paciencia divina de completar los 73 minutos, queda la siguiente sensación.

Neil Young junto a la banda que lo acompaña en los últimos años, Promise of the Real, y su flamante esposa, Daryl Hannah se juntaron en el rancho de Willie Nelson a pasar el día.

Después que el grupo se fumara unos porros poderosos, mientras flotaban en el aire, a Daryl se le ocurrió hacer una película.

Willie probablementé recordó que tenía en un ropero vestimentas antiguas del Viejo Oeste, Neil propuso tal vez que podían tocar un par de temas para incluir secuencias musicales y de esa experiencia surgió Paradox.

Una bizarrada absoluta que representa el debut como directora de Hannah y que probablemente Andy Warhol hubiera amado en 1966.

No es mi intención hacer una apología a las drogas pero creo que si ves este film en un estado de sobriedad, como lo hice yo, la experiencia no es la misma.

Al menos es necesario estar un poco entonado con algún vino o cerveza para dejarte llevar por este cuento lisérgico que carece por completo de sentido.

Si alguien me pregunta de que va este film la verdad es que no sé que responder.

En todo caso puede construir una idea de lo que vi.

Neil Young y sus compañeros interpretan a unos cowboys renegados en la época del Viejo Oeste que intentan encontrar un tesoro escondido.

Durante la travesía se ven afectados por los efectos de la luna llena que elimina sus inhibiciones.

Los forajidos entonces se convierten en espíritus libres del universo que fluyen a traves de las música que surge de sus almas.

Nos referimos a una película que tiene diálogos con frases como «el tiempo es fluido» y presenta escenas donde Daryl Hannah aparece flotando como si fuera un barrilete, como una especie de hada mística, atada con una cuerda a la cintura de Neil Young , quien camina por el campo tocando un ukelele.

Todo lo que se ve en el film es completamente fumado.

La prensa aniquiló a Hannah por esta producción y la verdad que su labor es complicada de defender.

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En principio no se aprecia ninguna dirección o coherencia en la narración de la historia o lo que sea que deseaba hacer con este proyecto.

Su cámara registra paisajes naturales con una linda fotografía y no hay mucho más que eso.

La vestimenta de los personajes tiene un interesante estilo steampunk y Young interpreta una versión extendida de su clásico, Pochahontas que se disfruta y es interesante de escuchar.

El resto pasa por ver a un grupo de tipos discutiendo filosofías que no tienen el menor sentido ni conducen a nada relevante.

Paradox podría ser vista como un extenso video clip experimental que tal vez complazca a los fans más hardcore de Neil Young, pero para el resto puede ser un tortura.

En mi caso si bien me gusta la música de Young, no volvería a ver este film otra vez, ya que no le encontré ningún valor especial que amerite a revivir la experiencia.

Este es el avance.