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Reseña de The Runaways (2010)

Calificación: C+

Si había una banda de rock cuya historia era digna de una película de Hollywood era The Runaways.

La primera agrupación femenina del rock que a mediados de los años ´70 volvió a encarnar la rebeldía más pura del género.

En un momento donde la música disco era el fenómeno comercial en boga y el campo del rock, con excepción de Suzie Quatro, era un mundo dominado por los hombres, estas chicas que no tenían más de 17 años desafiaron no sólo a una industria sino también a una cultura que la marginaba.

Joan Jett, Cherrie Currie, Lita Ford, Jackie Fox y Sandie West,las integrantes de la  primera formación original, tuvieron que luchar contra los prejuicios machistas de la época para demostrar que no eran un chiste y tenía el talento para sobresalir en el mundo de la música.

Si bien Suzie Quatro había sido la gran pionera entre las mujeres del rock, el suceso de The Runaways les abrió la puerta a todas las artistas que vinieron después.

Hace rato que venía postergando el visionado de este film del 2010 y me encontré con una enorme decepción cuando la vi este fin de semana.

The Runaways es una película que desperdicia la historia real de la banda y las interpretaciones de las protagonistas. Probablemente lo único rescatable de esta producción.

La dirección corrió por cuenta de Floria Sigismundi, quien es una reconocida realizadora de video clips, que trabajó con diversos artistas como The White Stripes, David Bowie y Christina Aguilera entre otros.

Este fue su primer proyecto para el cine, donde también fue responsable del guión, y demostró que no supo estar a la altura de las circunstancias.

The Runaways resultó una película desapasionada con la temática que aborda y terminó arruinada por el retrato que le dio Sigismundi a la historia.

De acuerdo a sus declaraciones en la prensa, slla no deseaba narrar la biografía de la banda sino un coming-of -age femenino de ficción ambientado en los años ´70.

En consecuencia, nos encontramos con un film donde el 90 por ciento de las situaciones que se retratan son falsas y las verdaderas fueron distorsionadas.

La dirección de Sigismundi está más interesada en la iconografía de las Runaways que en la música y eso dio por resultado una producción superficial que resume de un modo criminal lo que fue una historia apasionante.

La cantante Cherrie Currie, quien cedió los derechos de su autobiografía, quedó decepcionada con el modo en que la cineasta manejó las experiencias de la banda y luego del estreno brindó en los medios una declaración que describe a la perfección este film.

«Esta es la interpretación personal de la directora y no de lo que realmente sucedió. La historia real, que es completamente diferente, está en mi libro y fue una experiencia épica que no se plasmó en el cine«.

Al leer el guión Lita Ford se desvinculó de este proyecto y la bajista Jackie Robbins directamente se negó a ceder los derechos de su imagen, motivo por el cual su rol en la película lleva otro nombre.

Por su parte Joan Jett, que asesoró a los productores, no quedó satisfecha con el resultado final y manifestó su descontento por el hecho que la directora no le dedicó la película a la baterista Sandie West, quien falleció en el 2006.

Lo tuvo que hacer ella en el audiocomentario del dvd.

Un serio problema que tiene esta propuesta es que la narración de Sigismundi se concentra exclusivamente en la historia de vida Cherrie Currie, que encima de acuerdo a la artista se distorsionó, y deja en un rol muy marginal al resto de las integrantes.

Joan Jett tiene un poco más de espacio pero termina siendo un personaje secundario cuando se trató de un miembro clave del grupo.

Lo mismo ocurre con Lita Ford, una guitarrista fabulosa que tal vez por cuestiones legales quedó completamente marginada del conflicto central. Inclusive en el final ni siquiera se menciona que la artista tuvo una carrera exitosa como solista y sigue vigente en la actualidad.

Si en una película de la Runaways esa mínima información es ignorada el resto no se puede tomar con mucha seriedad.

Obviamente nadie esperaba un documental, al tratarse de una recreación, pero la gran decepción pasa por el hecho que la directora ni siquiera manifestó interés por la música de la banda que hasta llega a tener un rol secundario. El foco está puesto en aspectos sensacionalistas como la bisexualidad de las protagonistas y sus excesos.

Lo único rescatable de este film son los trabajos de Dakota Fanning como Currie y Kirsten Stewart en el papel de Joan Jett. Ambas presentan una buena interpretación que de hecho fue elogiada por las artistas reales, pese a que no quedaron encantadas con este film.

Un caso diferente es el de Michael Shannon cuya sobreactuación permanente convierte al manager Kim Foley en el rockero Pomelo de Peter Capuzotto.

Lamentablemente la directora se limitó a retratar a un grupo de chicas adolescentes que se drogan y tiene sexo, arman una banda y dan un par de recitales en Japón y eso es todo.

Las giras que emprendieron con los Ramones, Cheap Trick o Van Halen, agrupaciones que no sólo las respetaron, sino que además las apoyaron cuando la prensa no las tomaban en serio ni siquiera tienen una mención.

La importancia de esta banda dentro del rock nunca termina de quedar plasmada en la película y eso es muy decepcionante.

En realidad nunca llegamos a conocer a las Runaways  porque la historia del grupo se resume de un modo superficial que al final no te deja nada.

Una pena porque había material de sobra para brindar una gran película.

 

 

2 comentarios en «Reseña de The Runaways (2010)»

  • Mirá que si tenían una banda e historia para «reforzar» el emponderamiento femenino y demás que hoy en día preocupa a Hollywood, era con The Runaways. Y más en 2010 que el tema recién amanecía.

    Pero, por lo que describís Hugo -y veo del trailer-, me da la sensación que la enfocaron de una forma tan distorsionada como quisieron hacer en su momento con Tomb Raider. O sea, forzar a una imagen que no corresponde bajo un pretexto «artístico» cuando no deja de ser un mero capricho de dirección. Porque clavar de título el nombre de una banda legendaria y quiebre en la historia del Rock para hacer algo trillado y que ya se vio hasta el hartazgo… una venta de humo.

    En fin, gracias por la reseña Hugo!

  • Tal cual y las propias artistas reales de la banda en este caso confirmaron que la película es cualquiera.
    Mencionaste algo que es muy cierto JuanMa.
    En lugar de concentrase en los que lograron las Runaways en el mundo del rock que transmitía un mensaje positivo se estacaron en el tema de las drogas y la sexualidad de ellas que es lo menos importante en la historia de la banda.
    Saludos!

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